jueves, 23 de octubre de 2008

BROADWAY... la avenida de los sueños...

Mis neuronas inquietas me piden que escriba más entradas para este blog y no puedo resistirme al chute de adrenalina que me proporciona mi cerebro cada vez que escribo algo.

Si nuestro coordinador viese esto (Aarón, va por ti) nos odiaría por apoyar al teatro musical (cerdos capitalistas), pero nadie puede negar que las luces, el ambiente y los taxis amarillos de la ciudad que nunca duerme invitan a soñar con los escenarios más impresionantes del mundo entero...

Las obras de Broadway siempre se llevan a cabo en los 38 teatros de la zona concentrados alrededor de Times Square entre las calles 41 y la 53. La mayor parte de ellas son producciones musicales con escenografías espectaculares, vestidos extravagantes y música y danzas de la mas alta calidad. Las entradas para estas obras teatrales varía de $50 a $90 dólares, una pasta, vamos...

Las Obras fuera de Broadway se llevan a cabo en aproximadamente 50 teatros mas pequeños localizados en varias partes de Manhattan. Las producciones pueden ser musicales, comedias o dramas mas serios y típicamente son menos espectaculares que las Obras de Broadway. El talento es usualmente de primera calidad y aquí es donde usualmente las futuras estrellas de Broadway adquieren su experiencia. El precio de las entradas varía de $20 a $50 dólares, para mileuristas, básicamente... Si pienso en un teatro de esos 38... me viene a la mente el MAJESTIC, que durante más de siete años de imparable éxito ha visto cómo el FANTASMA DE LA ÓPERA ha sido representado noche tras noche en su escenario.

Y es que el Fantasma es mi musical favorito. Después de verlo en Madrid, en el LOPE DE VEGA, es inexplicable lo que sentí cuando fui espectador de uno de los mayores musicales de todos los tiempos en aquel emblemático teatro... Broadway me embriagaba... pero, esa es otra historia... LOS PRODUCTORES, LOS MISERABLES, HAIRSPRAY, RENT, MAMMA MÍA!, LA BELLA Y LA BESTIA, EL REY LEÓN, SWEENEY TODD, CHICAGO, son algunas de las obras que vienen a mi mente y muchas de ellas siguen aún en cartel, después de décadas de irrefrenable éxito de crítica y público.

Broadway puede ser el reflejo del elitismo capitalista en los teatros, de la parafernalia, el adorno y la pomposidad extrema, de la espectacularidad y "barroquismo" desmesurado... pero me permito decir que no me importaría ver la GRAN VÍA madrileña convertida (y va por el buen camino) en algo por el estilo... como amante del teatro, disfruto con una pieza independiente de presupuesto virtualmente inexistente... pero que me permitan que mi corazón romántico disfrute con la magia, la música, las luces, los bailes, los vestidos, las tapicerías rojas, de los sueños que cada pieza musical de cada obra de Broadway infunden en mi alma y que me hacen recordar que, al menos durante dos horas y un descanso y en un recinto cerrado, el mundo puede ser un lugar un poco más luminoso, más brillante, más mágico... un poco mejor.

Soñad, queridos amigos... soñad con las luces de Broadway, porque ellas seguirán fulgurando en la noche de la jubilosa Manhattan aún cuando nosotros hayamos dejado escapar el último hálito de vida...

Somos unos soñadores empedernidos...

1 comentario:

Miguel Ángel Bollo Padrón dijo...

Fran me impresiona lo que puedes llegar a escribir, creo que eres una de las personas que cada letra, cada palabra y cada frase haga que me imagine y desee ir al lugar que estas detallando. Me encantaria irme algun dia a brodway contigo tio porque debe ser una de las cosas mas bontas e impactantes que puede ver uno en su vida.
Fran solo te doy un consejo más:
NO CAMBIES NUNCA Y NO DEJES DE ESCRIBIR JAMAS.